sábado, 24 de noviembre de 2018

El Resentimiento Te Aleja de La Gratitud



"La queja y el resentimiento sólo te conectan con la escacez"


En esta parte del mundo, en los Estados Unidos, el tercer jueves de noviembre se celebra la hermosa tradición del Día de Gracias o Thanksgiving. Las redes sociales y nuestros teléfonos se llenan de mensajes y reflexiones sobre la gratitud y el tema pasa a un primer plano en nuestras vidas.

Como escribí en el post sobre este tema el año pasado, gratitud no sólo es una emoción que hasta corporalmente podemos sentirla,  desde el plexo solar hasta el pecho, es una actitud hacia la vida. Algunas veces hasta se nos hace un nudo en la garganta, no por tristeza o angustia, sino porque nos invade esa suave y amorosa sensación de gratitud.

La gratitud es en sí misma, una declaración de abundancia porque decidimos registrar todo lo que la vida nos dió, nos dá y confiamos en que nos seguirá nutriendo, en lugar de lamentarnos por lo que nos falta.

La gratitud no se practica de la boca para afuera. No alcanza con repetir la palabra "gracias", como una mera formula social de buena educación. Hay un contexto emocional propicio en donde la gratitud puede manifestarse. 

Es muy difícil conectar con la generosidad y la gratitud cuando se habita en la ira y el resentimiento.

El resentido está siempre con sed de venganza, de resarcimiento, de exigir como buena víctima, que le den lo que considera le fue arrebatado injustamente.

El controlador, ciego a su ceguera, es como un perro alterado y rabioso que da vueltas sobre sí mismo perdido en su obsesión por el control y sin darse cuenta termina siempre mordiéndose su propia cola.

viernes, 16 de noviembre de 2018

Bloqueo Emocional

La vibración del amor es la frecuencia más alta de la energía.


El Amor... uno de los motores más poderosos del universo. Pero cuando hablamos de Amor, de qué estamos hablando?

Desde la tradición del yoga, el sentimiento amoroso es una energía, de determinada frecuencia vibracional que se condensa en el chakra del corazón y desde allí sale y se expresa.

Quienes tienen bloqueos en ese centro energético, no pueden expresar esta energía con facilidad y se sienten solos y angustiados.

Cuando este centro vibra en una determinada frecuencia y entra en resonancia con otro ser que está en la misma frecuencia se produce un intercambio amoroso pleno. 

Esto puede darse una sola vez, varias veces, por mucho tiempo, por toda la vida humana. Todo depende de la capacidad para mantener esa sintonía.

Mantener la energía del amor en movimiento, sin bloqueos requiere de un gran trabajo de conciencia e inversión en nuestro desarrollo personal, sobre todo en reconocer nuestro mundo emocional y aprender a gestionar nuestras emociones. Por ejemplo la ira y el resentimiento, cuando se convierten en el estado emocional constante en el que habitamos, son energías que vibran muy densamente, porque están asociadas al miedo y la escaccez, y por ende nos alejan del amor y la abundancia.

Mira tu mundo emocional y trata de reconocer cuál es tu estado de ánimo más constante y nómbralo. Es de alegría, gratitud, aceptación o todo  lo contrario? Te acerca o te aleja de vibrar en el amor? 

Recuerda, uno atrae la energía en la que vibra, por eso todo empieza por uno!

Conversaciones Difíciles

“Todo vivir humano ocurre en conversaciones y es en ese espacio donde se crea la realidad en que vivimos”

 (H. Maturana)


A mí me gustaría cambiar el final de la frase y decir: " y es en ese espacio donde se crea la realidad en la que queremos vivir”.

Creo en el poder de la palabra como generadora de “mundos” y es justamente aquí, en esta comunidad de Encuentros de Mujeres, donde privilegiamos el conversar como un movimiento que nos acerca y nos ayudaba conectar significativamente.

Es por eso que quiero preguntarles, si para cerrar este año en paz, sienten que tienen conversaciones pendientes. Con quién o quiénes?

Hay conversaciones difíciles, que preferimos evitar. Son esas conversaciones que no podemos o no sabemos cómo abordar. Pero también sabemos que hacernos las distraídas no soluciona la incomodidad, enojo o frustración que tenemos vinculada a una determinada persona, sólo por callar.

Muchas veces diseñar una conversación difícil nos ayuda a poder plantearla. Para eso es importante reflexionar sobre algunos puntos:

1-Crear el contexto adecuado.
2-Tener claro que quieres lograr con la conversación: disculparte, aclarar algo, hacer un pedido, explicar tu enojo, reconciliarte o terminar una relación.
3-Es importante poder expresar qué es lo que molesta, incomoda o enojada o aclarar algo si es que hay un mal entendido.
4-Poner el foco en uno, en cómo te sientes como resultado de la conducta o actitud del otro, sin acusar. De esta manera no estás culpando al otro por sus acciones, sino describiendo lo que a ti te pasa cuando el otro se comporta de una determinada manera. Así la otra persona no se siente atacada y no va tender a responder reactivamente, defendiéndose.
5-Poder hacer pedidos claros para superar la situación, sabiendo de antemano que podemos recibir una respuesta positiva o negativa.

Lo importante es abrir espacios de conexión sincera y lograr los objetivos que te propones, no que te den la razón. Nos puede ir bien o mal pero más allá del resultado, nada nos quitará la tranquilidad de haber probado de no quedarnos con conversaciones pendientes.

El Perfeccionismo No Es Excelencia

"Los perfeccionistas se enfocan en los demás y en lo que piensan de ellos, más que buscar excelencia"


La comparación mata la creatividad y nos sumerge en la frustración, en la peligrosa creencia de que no somos suficientes.

Vivimos inmersos en una cultura que promueve el perfeccionismo y nos bombardea a diario con imágenes de una realidad ideal, editada al detalle.

Los mensajes maníacos de “tu puedes más y debes alcanzar tu máximo potencial”, es una constante en las redes sociales y con semejante contexto, donde el foco está puesto en la meta, más que en la necesidad de desarrollar destrezas y habilidades específicas, es muy fácil sentir una serie de frustraciones innecesarias.

Cuando nos compararnos con otros, en algún punto nos estamos traicionando a nosotros mismos.

Al descartar de plano que lo nuestro NO es tan bueno, invalidamos nuestros dones, talentos y eso nos paraliza, bloqueando nuestra creatividad y coraje para tomar riesgos y animarnos a avanzar.

Conocerme, validarme, entender cuál es mi potencial y qué necesito desarrollar para poder plasmarlo, es un camino interior.

Más que compararnos con el afuera, aprendamos a mirar para adentro. Más que perseguir la perfección, persigamos el compromiso de no traicionar nuestra autenticidad, que es donde reside "la semilla" de todo nuestro talento. Aprendamos a regarla y nutrirla para que se desarrolle.

¿Qué es la ecuanimidad?

"La ecuanimidad es la compañera perfecta de la compasión" 


Como dice Roshi Joan Halifax, se necesita de una gran fortaleza en la espalda para sostenernos en medio de la adversidad. Y esa es la cualidad mental de la ecuanimidad.
Pero también es necesario un frente suave; la capacidad para estar abiertos al mundo tal y como es.


Es la espalda fuerte que da soporte al suave frente de la compasión. Estas cualidades interdependientes son la base para el trabajo efectivo con el sufrimiento.
La ecuanimidad nos permite la calma radiante, la paz y la confianza que recibe el mundo y al mismo tiempo nos hace posible dejarlo ir.